Si estás pensando en un viaje a Marruecos, lo primero que te viene a la mente probablemente sean las ciudades más famosas como Marrakech, Fez, Casablanca y, claro, Tánger. Pero lo que muchos no saben es que uno de los mayores tesoros de Marruecos se encuentra más allá de sus ciudades: el desierto del Sahara.
Elegir la ruta por el desierto de Marruecos correcta puede marcar la diferencia entre un simple viaje y una experiencia inolvidable. ¿Cómo hacerlo? Aquí te guiaré para que elijas la mejor opción, ya sea que empieces en Fez, Marrakech o incluso en Tánger. También te daré algunos consejos sobre las mejores rutas por Marruecos.
¿Por qué elegir una ruta por el desierto de Marruecos?
El desierto del Sahara es uno de los lugares más mágicos de Marruecos. Aunque las ciudades como Tánger, Fez o Casablanca tienen su encanto, el desierto te ofrece una experiencia completamente diferente. Aquí no solo verás impresionantes dunas, sino que también vivirás una conexión con la naturaleza y la cultura bereber. El silencio del desierto y las noches estrelladas crean un ambiente difícil de describir, algo que no encontrarás en las calles bulliciosas de Marrakech o Tánger.
Si estás planeando tu viaje por Marruecos, la clave es elegir bien la ruta. ¿Prefieres un desierto más accesible como Merzouga, o buscas algo más remoto como las dunas de Erg Chigaga? Todo depende de lo que estés buscando en tu viaje.
¿Qué tipo de experiencia estás buscando?
Antes de elegir una ruta, es importante saber qué tipo de experiencia quieres tener en el desierto de Marruecos.
¿Quieres una aventura auténtica, como dormir en una haima en medio del desierto?
¿Te interesa explorar la cultura bereber?
¿Prefieres un viaje más cómodo o una experiencia más salvaje y fuera de lo común?
Dependiendo de lo que respondas, puedes optar por una de las varias rutas por Marruecos que te llevarán al desierto. Aquí te dejo las más populares.
Rutas más populares por el desierto de Marruecos
1. Merzouga y las dunas de Erg Chebbi
Si has visto fotos del desierto de Marruecos, probablemente has visto las dunas de Erg Chebbi en Merzouga. Este es uno de los destinos más populares para los viajeros que buscan una experiencia clásica en el desierto.
Merzouga es accesible desde Fez, Marrakech y otras ciudades principales como Casablanca.
Aquí, puedes montar en camello, dormir en una haima tradicional y disfrutar de un atardecer impresionante desde las dunas.
Es una excelente opción si no tienes mucho tiempo, ya que muchas excursiones parten desde Marrakech o Fez, y suelen durar entre 2 y 4 días.
Aunque Merzouga es el destino más conocido, muchas personas también comienzan su viaje desde Tánger, haciendo paradas en otras ciudades antes de llegar al desierto.
2. Zagora y las dunas de Erg Chigaga
Si prefieres evitar las zonas más turísticas, las dunas de Erg Chigaga, cerca de Zagora, ofrecen una experiencia más remota. Esta zona es menos conocida que Merzouga, lo que la convierte en una excelente opción para aquellos que buscan un viaje más auténtico y alejado de las multitudes.
Para llegar a Zagora, generalmente se parte desde Marrakech, haciendo de esta una excelente opción si ya tienes planeado visitar la ciudad.
El paisaje aquí es más salvaje, y al estar menos desarrollado turísticamente, tendrás la oportunidad de vivir una experiencia más auténtica y cercana a la naturaleza.
3. Desierto de Agafay (cerca de Marrakech)
Si no tienes tiempo para un viaje largo, pero no quieres perderte la experiencia del desierto, el desierto de Agafay, ubicado a solo 45 minutos de Marrakech, es una opción ideal.
Aunque no tiene las dunas de Merzouga o Erg Chigaga, ofrece paisajes áridos y rocosos que igualmente te harán sentir como en medio del Sahara.
Es perfecto si estás de visita en Marrakech o incluso si has comenzado tu viaje en ciudades más al norte como Tánger o Fez y tienes solo un par de días para una escapada al desierto.
4. Valle del Draa
El Valle del Draa es otra opción interesante si buscas una ruta que combine el desierto con oasis verdes y montañas. Este valle es famoso por sus palmerales y kasbahs, lo que te permite disfrutar de un paisaje más variado durante tu viaje por el desierto.
Esta ruta suele comenzar en Marrakech y, dependiendo de tu tiempo, puedes hacer una excursión de varios días que incluya visitas a pueblos bereberes y noches en haimas.
Es una excelente opción si tienes más de 3 días y quieres algo más que solo dunas.
Ciudades de inicio para tu ruta por el desierto
La mayoría de las rutas por Marruecos hacia el desierto comienzan en alguna de las principales ciudades del país. A continuación, te detallo las más comunes:
Marrakech:
Esta es, sin duda, una de las ciudades más populares para iniciar un viaje al desierto. Desde aquí, puedes llegar fácilmente a Merzouga, Zagora o el desierto de Agafay. Muchos turistas combinan su visita a Marrakech con una escapada al Sahara.
Fez:
Otro punto de partida muy común es Fez. Esta ciudad es conocida por su impresionante medina y es ideal si quieres hacer una ruta que te lleve a Merzouga o incluso a lugares más alejados como Zagora.
Tánger:
Aunque menos común que Marrakech o Fez, Tánger también es una buena opción si estás en el norte del país y quieres combinar tu viaje con un recorrido más largo. Puedes hacer paradas en Fez, Casablanca o Marrakech antes de adentrarte en el desierto. Tánger es una ciudad vibrante con una mezcla única de influencias europeas y africanas, lo que la convierte en un excelente punto de inicio.
Casablanca: Aunque Casablanca es más conocida por su arquitectura moderna y su costa, también es una base para muchos viajeros que buscan aventurarse hacia el desierto. Desde aquí, puedes tomar un tren o un vuelo hacia Marrakech o Fez y comenzar tu aventura en el desierto.
Consejos para tu viaje por el desierto
Antes de lanzarte al desierto, es esencial estar bien preparado. Aquí te dejo algunos consejos:
Protección solar: El sol en el desierto puede ser implacable. Lleva siempre un buen protector solar, gafas de sol y un sombrero.
Ropa adecuada: Durante el día hace mucho calor, pero por la noche, las temperaturas pueden bajar considerablemente. Lleva ropa ligera para el día y algo más abrigado para la noche.
Agua: Asegúrate de llevar suficiente agua, especialmente si vas a hacer una caminata o un paseo en camello.
Calzado cómodo: Si vas a caminar o hacer trekking por las dunas, es importante llevar calzado resistente y cómodo.
Mejor época para hacer una ruta por el desierto
El clima en el desierto puede variar mucho, así que elegir la mejor época para tu viaje es crucial. Las mejores épocas para hacer una ruta por el desierto son la primavera (marzo a mayo) y el otoño (septiembre a noviembre), cuando las temperaturas son más suaves. Evita el verano, ya que el calor puede ser extremo, especialmente en zonas como Merzouga.
Cultura bereber y autenticidad
El desierto no solo es impresionante por sus paisajes; es también hogar de la cultura bereber, una de las culturas más antiguas de Marruecos. Si tienes la oportunidad, pasa tiempo con una familia bereber, aprende sobre sus costumbres y disfruta de una cena tradicional bajo las estrellas.
Preguntas frecuentes
1. ¿Cuánto cuesta una ruta por el desierto en Marruecos?
Los precios varían según la duración y el tipo de ruta que elijas. Una excursión de un día desde Marrakech o Fez puede costar entre 30 y 50 euros, mientras que un viaje de varios días, como los que incluyen Merzouga, puede oscilar entre 150 y 400 euros.
2. ¿Es seguro viajar al desierto? Sí, las rutas por Marruecos que incluyen el desierto
Consejos adicionales para una experiencia inolvidable en el desierto
Elige una agencia confiable: Aunque hay muchas agencias que ofrecen rutas por Marruecos, no todas tienen el mismo nivel de calidad y seguridad. Investiga bien, lee reseñas y elige una que tenga buena reputación. Si comienzas tu ruta en Tánger, Fez o Marrakech, estas ciudades tienen muchas opciones, pero asegúrate de que la agencia esté bien establecida.
Haz una parada en los pueblos cercanos:
Si tu viaje te lleva por rutas más largas, aprovecha para conocer algunos de los pueblos y ciudades del camino. Por ejemplo, si inicias en Tánger, puedes hacer una parada en Fez o incluso en Casablanca antes de llegar al desierto. Estos pueblos y ciudades ofrecen una visión más completa de la vida y la cultura en Marruecos.
No te pierdas el atardecer y el amanecer en el desierto:
Uno de los momentos más mágicos de cualquier ruta por el desierto es ver el sol ponerse o salir detrás de las dunas. En lugares como Merzouga o Erg Chigaga, estos momentos son inolvidables y te permiten conectarte profundamente con la naturaleza.
Explora diferentes tipos de desiertos:
Aunque las dunas de Merzouga son las más famosas, también puedes explorar otros tipos de paisajes desérticos, como las zonas rocosas del desierto de Agafay cerca de Marrakech o las remotas dunas de Zagora. Cada lugar ofrece una experiencia única.
Rutas por Marruecos:
Más allá del desierto
Aunque el desierto es uno de los mayores atractivos del país, hay otras rutas por Marruecos que te permitirán explorar su rica diversidad geográfica y cultural. Aquí te dejo algunas ideas:
Ruta desde Tánger a Fez:
Si empiezas tu viaje en el norte, como en Tánger, puedes seguir hacia el sur y visitar lugares emblemáticos como Chefchaouen, la ciudad azul, y finalmente llegar a Fez, conocida por su antigua medina, considerada Patrimonio de la Humanidad. Esta ruta combina paisajes de montaña, cultura y, finalmente, el acceso al desierto.
Ruta desde Casablanca a Marrakech:
Esta ruta te permitirá explorar tanto la moderna Casablanca como la histórica Marrakech. Si tienes tiempo, también puedes extender el viaje hacia el desierto o incluso visitar el Valle del Draa, un destino menos conocido pero igualmente impresionante.
Ruta del Atlántico:
Si prefieres una ruta costera, puedes explorar la costa atlántica de Marruecos, comenzando en Casablanca y pasando por lugares como Essaouira o Agadir. Aunque no es una ruta por el desierto, ofrece playas increíbles y una visión diferente del país.
Viajar desde Tánger:
Un punto de partida fascinante
Si tu viaje comienza en Tánger, estás en una ciudad única que combina lo mejor de Marruecos con influencias europeas debido a su proximidad a España. Tánger es un excelente punto de partida para explorar el norte del país y, luego, adentrarte hacia el sur en busca del desierto.
Desde Tánger, puedes seguir varias rutas por Marruecos hacia el desierto, pasando por ciudades como Fez, Marrakech o incluso Casablanca. Aunque el trayecto es más largo comparado con salir desde ciudades más cercanas al Sahara, como Fez o Marrakech, te permitirá conocer una parte diferente del país antes de llegar a las dunas.
Además, Tánger te ofrece la oportunidad de explorar la región del Rif, con paisajes montañosos y ciudades pintorescas como Chefchaouen, antes de emprender el viaje hacia el sur.
Conclusión:
La magia del desierto en Marruecos
Un viaje al desierto en Marruecos es una experiencia inolvidable que te conectará con la naturaleza, la cultura bereber y la historia del país. Ya sea que elijas comenzar tu ruta en Tánger, Fez, Marrakech o Casablanca, cada ciudad ofrece una puerta de entrada única a la aventura. Con las dunas de Merzouga, las remotas tierras de Erg Chigaga y los paisajes desolados del desierto de Agafay, Marruecos tiene algo para todos los gustos.
Recuerda planificar bien tu viaje, elegir la ruta que mejor se adapte a tus intereses y prepararte para una experiencia que quedará grabada en tu memoria. Ya sea disfrutando de una noche bajo las estrellas o explorando las vastas dunas en camello, el desierto de Marruecos te espera con los brazos abiertos, listo para mostrarte sus secretos.
¡Que tengas un viaje maravilloso y lleno de aventuras en tu ruta por el desierto de Marruecos!
1. Transporte
Dependiendo de dónde inicies tu viaje (ya sea Marrakech, Fez, Tánger o Casablanca), las distancias hacia el desierto pueden ser largas. Estas son las opciones más comunes para desplazarte:
Coche de alquiler:
Si prefieres más independencia y libertad para explorar a tu ritmo, alquilar un coche puede ser una excelente opción. Muchas personas que empiezan su ruta en Marrakech o Fez optan por alquilar un vehículo para recorrer las carreteras de Marruecos. Las carreteras suelen estar en buen estado, especialmente las que conectan las ciudades principales con los destinos turísticos como Merzouga.
Transporte público:
Si el alquiler de coche no es una opción para ti, siempre puedes recurrir a los autobuses que conectan ciudades como Marrakech, Fez, y Casablanca con puntos más cercanos al desierto. Algunas rutas en autobús, como la que conecta Fez con Merzouga, pueden ser largas, pero son económicas y te permitirán disfrutar del paisaje marroquí durante el trayecto.
Tours organizados:
Muchos viajeros optan por contratar tours organizados, especialmente si parten de ciudades como Marrakech, Fez o incluso Tánger. Estos tours suelen incluir transporte, guías locales, alojamiento en el desierto y actividades como paseos en camello y noches en haimas. Es una opción cómoda y práctica si prefieres no preocuparte por los detalles logísticos.
2. Duración del viaje
Las rutas por Marruecos hacia el desierto pueden variar en duración según el tiempo que tengas disponible y el tipo de experiencia que busques:
Escapadas cortas (2-3 días): Si tienes poco tiempo, es posible hacer una excursión al desierto desde Marrakech o Fez en tan solo dos o tres días. Estas escapadas suelen incluir una noche en el desierto, un paseo en camello y algunas paradas en el camino, como en el famoso Ksar de Ait Ben Haddou.
Viajes más largos (5-7 días): Si tienes más tiempo, puedes hacer una ruta más completa, que incluya varios días en el desierto, visitas a ciudades cercanas y una inmersión más profunda en la cultura bereber. Muchos viajeros eligen combinar su estancia en el desierto con visitas a otros destinos icónicos como las montañas del Atlas o la Garganta del Todra.
3. Equipamiento y qué llevar
El desierto tiene condiciones climáticas extremas, por lo que es importante ir bien preparado. Aquí te dejo una lista de lo esencial para llevar en tu viaje:
Ropa ligera pero abrigada: Durante el día, las temperaturas pueden ser muy altas, por lo que es importante llevar ropa ligera, de algodón y de colores claros. Sin embargo, durante la noche, las temperaturas bajan considerablemente, así que no olvides empacar un abrigo o chaqueta.
Sombrero y gafas de sol: La exposición al sol en el desierto es constante, por lo que protegerte del calor es fundamental. Un sombrero de ala ancha y gafas de sol de buena calidad te serán de gran ayuda.
Protector solar: El sol del desierto puede ser implacable. Lleva un protector solar de amplio espectro y aplícalo con frecuencia, especialmente en las zonas expuestas como la cara, los brazos y las piernas.
Calzado adecuado: Si vas a caminar por las dunas, lo mejor es usar calzado cómodo, como botas ligeras o zapatillas de trekking. Además, unos buenos calcetines transpirables te ayudarán a mantener los pies cómodos y secos.
Botellas de agua: La hidratación es crucial en el desierto. Aunque los guías suelen proporcionar agua, siempre es recomendable llevar tus propias botellas para asegurarte de no quedarte sin este recurso esencial.
4. Conexión con la cultura local
Uno de los mayores atractivos de hacer una ruta por el desierto de Marruecos es la oportunidad de conectar con la cultura local, en especial la cultura bereber. Muchos de los tours organizados ofrecen la posibilidad de pasar tiempo en campamentos bereberes, donde puedes aprender más sobre sus costumbres, música y gastronomía.
La música gnawa y tambores tradicionales: Si tienes la oportunidad, disfruta de una velada alrededor de la hoguera, donde los bereberes tocan música gnawa y cantan al ritmo de los tambores. Es una experiencia única que te sumergirá en el corazón de la cultura del desierto.
Cocina bereber: La gastronomía en el desierto es simple pero deliciosa. Platos como el tajín y el cuscús son comunes, y muchas veces se cocinan al estilo tradicional, con ingredientes frescos y locales. También puedes disfrutar de té de menta, que es una parte fundamental de la hospitalidad marroquí.
Mejor ruta para empezar desde Tánger
Si inicias tu viaje en Tánger, puedes planificar una ruta más larga que te lleve a través de algunas de las ciudades más fascinantes de Marruecos antes de llegar al desierto. Aquí te dejo una sugerencia:
Tánger: Comienza en esta vibrante ciudad portuaria, donde podrás explorar la mezcla única de culturas europea y africana.
Fez: Desde Tánger, puedes dirigirte hacia Fez, famosa por su medina histórica, una de las más antiguas y mejor conservadas del mundo árabe.
Marrakech o Casablanca: Dependiendo de tu tiempo, puedes optar por visitar Marrakech, una de las ciudades más emblemáticas de Marruecos, o hacer una parada en Casablanca para ver su arquitectura moderna y la famosa Mezquita Hassan II.
Desierto de Merzouga: Desde cualquiera de estas ciudades, puedes dirigirte finalmente hacia Merzouga y las impresionantes dunas de Erg Chebbi, donde te espera la aventura del desierto.
Conclusión final: Un viaje que transforma
Elegir una ruta por Marruecos hacia el desierto no solo es una decisión sobre el destino, sino sobre el tipo de experiencia que deseas vivir. Ya sea que busques la majestuosidad de las dunas en Merzouga, la tranquilidad remota de Zagora o la cercanía del desierto de Agafay, cada ruta tiene algo especial que ofrecer.
Marruecos es un país lleno de contrastes, desde las bulliciosas calles de Marrakech y Fez hasta los paisajes infinitos del Sahara. Cada viaje es una oportunidad para descubrir algo nuevo, ya sea la calidez de la hospitalidad bereber o la belleza pura del desierto bajo un cielo estrellado.
Así que, ya estés planeando tu ruta desde Tánger, Fez, Casablanca o Marrakech, recuerda que Marruecos tiene una riqueza única que te espera a cada paso.
Y, por supuesto, ¡no olvides disfrutar de cada momento y perderte en la magia del desierto!